En un evento trascendental que reunió a jóvenes líderes de todo el país, el Encuentro Nacional de Comisiones Municipales de Juventud tuvo lugar en el icónico Museo de la Memoria en Tegucigalpa, marcando tres días de colaboración, aprendizaje y compromiso cívico.
Durante el evento, jóvenes representantes de diversas Comisiones Municipales de Juventud provenientes de todos los rincones de Honduras se dieron cita para fortalecer sus habilidades, intercambiar ideas y aportar perspectivas valiosas para el desarrollo sostenible de sus comunidades.
La ministra de juventud, Zulmit Rivera, y el viceministro de juventud, Hery Flores, junto con autoridades gubernamentales y miembros de la sociedad civil, se unieron a los jóvenes para enriquecer el diálogo y apoyar sus iniciativas.
El primer día del encuentro, las instalaciones del Museo de la Memoria fueron el escenario donde la juventud participante se sumergió en una serie de talleres esenciales. Los temas abordados incluyeron liderazgo y estrategias para el compromiso comunitario. Estos talleres no solo proporcionaron habilidades prácticas, sino que también fomentaron la construcción de redes y la colaboración entre los jóvenes líderes.
La segunda jornada continuó en el Museo de la Memoria, transformándose en un espacio de diálogo profundo. Los jóvenes se reunieron en mesas de trabajo en equipo, donde compartieron sus propuestas y reflexiones críticas sobre diversos temas que afectan a la juventud y la sociedad en general. Estas discusiones se centraron en comunicación efectiva, gestión de proyectos, encontrar soluciones concretas y acciones que contribuyan al bienestar de sus comunidades.
El tercer día del evento, el Parque Central de Tegucigalpa fue el escenario de un emotivo homenaje a la memoria del prócer Francisco Morazán. La ministra de juventud, Zulmit Rivera, pronunció palabras de inspiración y reconocimiento al legado de Morazán, destacando la importancia de la juventud en la construcción de un Honduras mejor. Posteriormente, el Encuentro concluyó en un lugar igualmente simbólico: el Museo Casa de Morazán, un cierre que resonó con el espíritu de liderazgo y cambio que caracteriza a la juventud hondureña.
El Encuentro Nacional de CMJ no solo ha dejado una impresión duradera en los participantes, sino que también ha reafirmado el papel vital que los jóvenes juegan en la promoción de valores cívicos y en la búsqueda de soluciones para los desafíos de la sociedad. El Instituto Nacional de la Juventud se enorgullece de haber sido parte de este evento que refuerza la visión de un futuro próspero y comprometido con el bienestar de Honduras y su ciudadanía.
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